La “diastasas abdominal”  es el aumento de separación de la distancia entre los músculos  rectos del abdomen, estos músculos van desde el pubis a las costillas, estos forman la línea alba.

A partir de 2,5 cm se empieza a considerar patológico y, aunque es mucho más habitual en las mujeres tras un embarazo, también puede aparecer en  el hombre o   en la mujer que no ha sido mamá.

Muchas personas acuden a nuestro centro para consultarnos la severidad de su diastasas, por dolor, por alteración en la dinámica lumbo-pélvica y en la esfera uroginecológica, etc.

TENGO DIÁSTASIS ABDOMINAL 

 AUTOEXPLORACION

  1. Túmbate en el suelo, flexiona las rodillas, apoya las plantas de los pies en el suelo.diastasis abdominal clinica cuevas 
  2. Palpa tu línea alba, comenzando en el pubis y ves subiendo hacia las costillas de forma transversal al recorrido de los  entre los músculos rectos del abdomen.
  3. De esta manera puedes sentir la resistencia que ofrece el tejido, la dureza que tiene tu línea alba en reposo.
  4. Coloca tus dedos de manera perpendicular a los rectos y a continuación haz el gesto de despegar la cabeza del suelo “mírate los pies”
  5. Aguanta unos segundos en esa posición y empuja tus dedos haciendo dentro y valora:
    • ¿Te caben los dedos? ¿Cuántos dedos te caben?
    • ¿Está duro el tejido y te empuja hacia arriba? 
    • ¿El tejido está blandito y se te hunden los dedos hacia abajo?¡DIÁSTASIS ABDOMINAL
  6. Repite el movimiento cambiando tus dedos a lo largo de la línea alba. Son importantes 3 zonas:
    • Zona infraumbilical (2 dedos por debajo de tu ombligo)
    • Zona supraumbilical (2 dedos por encima de tu ombligo)
    • Zona cerca a las costillas.

RESULTADO:

Si te caben entre 1, 2 dedos o el tejido está duro cuando levantas la cabeza para mirarte a los pies. En principio existe diástasis, haciendo ejercicio guiado por un profesional tienes expectativas de mejora y sobre todo que no empeore.

Si te caben 3 dedos o más, y sobretodo, si los dedos se te hunden mucho cuando haces el gesto de elevar la cabeza para mirarte los pies, indica que ese tejido ha sufrido mucho y debemos tener mucho cuidado para no lesionarlo más.

En este caso, hay diástasis y  te recomendamos que acudas a un fisioterapeuta experto en diástasis para poder hacer una adecuada valoración y medición  para personalizarte las pautas que necesites. 

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